SEMINARIO WEB DE LAC-ISP
Casos de éxito latinoamericanos
La Federación de Asociaciones y Cámaras de Proveedores de Internet de América Latina y el Caribe convocó a empresarios latinoamericanos a compartir sus experiencias y aprendizajes dentro del sector de las telecomunicaciones.
Patricio Seoane, gerente de Internet Services, vicepresidente NAP de CABASE y miembro de CAPPI, relató “Mi historia empezó en 1994 cuando venía de una compañía de tecnología que fabricábamos computadoras bajo un régimen similar al que había en Brasil que se le llamó la Resolución 44. En un momento empecé a leer La autopista de la información y Make and Money on the internet. Es muy interesante mirar casi 30 años atrás y darse cuenta que ya había gente que imaginaba como monetizar sobre la red. Allí fue donde empezamos a entrar en el mundo de internet. En el primer momento, ocurrió todo a través de un par de cobres telefónicos y llegamos a tener 20.000 usuarios. Un día vino una empresa internacional que se llamaba PSINet y compró mi compañía. En el año 2000, PSINet entró en el chapter eleven en EE.UU., adquirí nuevamente mi empresa, pero en un 15% del valor que la había vendido; la llamamos Internet Services. Hoy contamos con 30.000 clientes y estamos distribuidos en 22 ciudades de 5 provincias argentinas. Cuando empezamos hace 20 años nos dimos cuenta que había que dejar el Dial-Up e ir a la banda ancha. En aquel momento se cobraba por consumo. Luego tuvimos tarifa plana. Vendimos Wireless y ahora fuimos migrando a FTTH”.
Reconociendo las desventajas que encontraron en su trayectoria empresarial, a bien de servir como ejemplo, señaló “Los dueños de la compañía no estamos en las 22 ciudades y el ISP que compite con nosotros crece más rápido o mejor, porque logra tomar decisiones propias del lugar. Por otro lado, en la Argentina los carries venden el ancho de banda en función del volumen que uno compre. Si yo sumo las 22, ocupo 140 gigas. Si lo comprara en un único punto, pondría el precio. En cambio le pido 5 o 10 gigas en cada localidad y eso hace que mi precio en promedio no sea bueno. Tenemos otro factor en contra que es que no estamos cerca del cliente. Por eso, pusimos oficinas y gente que atiende al público, porque nuestra idiosincrasia marca que cuando surge un problema quieren vendedores de solapa. No porque tengan traje, sino porque quieren agarrar de la solapa al que les vendió el servicio y quejarse o recriminarle. Así ocurre en nuestra empresa y es un valor que nosotros no estamos dispuestos a perder. Lo hemos sostenido en el tiempo, nos cuesta más dinero, pero nos ha dado grandes resultados”.
Seguidamente destacó las decisiones positivas que contribuyeron a su crecimiento “Abrir sucursales para no depender de situaciones con economías regionales y diversificarnos lo que me permite probar estrategias en un lugar y si me va mal, no la repito en los otros 21. Aunque si me va bien la duplico sin haber tomado al cliente. También utilizo poco volumen en lo que es equipamiento, porque los servicios que vendo son exactamente iguales en las 22. Tengo una administración centralizada con monitoreo las 24 horas por 2 NOC, ubicados en Buenos Aires y Santa Fe, que funcionan con after record. Asimismo, hemos incorporado en los lugares donde tenemos FTTH televisión con java de contenidos. Ese es el futuro de los ISP”.
Más tarde destacó “En CABASE tengo la tarea de ser el vicepresidente de los Puntos de interconexión de los ISPs y muchas de estas 22 localidades las he conectado a dicha red. Uno puede lograr buenos precios sin necesidad de volumen, mediante la asociatividad con otros colegas de la industria de las telecomunicaciones”.
Por último señaló “Del lado del Gobierno lo que nosotros también logramos a partir de que formamos parte de CAPPI y de CABASE es tener un diálogo fluido, a pesar de que, en este momento, hay una disputa muy fuerte que tiene que ver con que han declarado el servicio de internet como público y regulan su precio lo que afecta nuestras decisiones de inversión”.
