EL MATRICULARSE ES UN ACTO DE RESPONSABILIAD
Cuestionables declaraciones
El Consejo Profesional de Ingeniería de Telecomunicaciones, Electrónica y Computación rechazó declaraciones recientes de políticos que rechazaron la matriculación de los profesionales.
Indicó el COPITEC que esto supone atentar contra la calidad de las actividades exigen la actualización de los profesionales, y contra el ejercicio de la responsabilidad que supone tomar decisiones en cada una de ellas.
El rol de los consejos y colegios es garantizar el ejercicio responsable de las distintas actividades como la medicina, la contabilidad, la ingeniería, entre otras. Fiscalizar sus tareas y trabajos no solo son una garantía para la sociedad sino que, además, suponen un ejercicio en torno a la ética y a la responsabilidad que supone asumir decisiones que, en muchos casos, pueden ser críticas y sensibles.
Contar con un diploma no siempre es suficiente para garantizar la toma de decisiones en una tarea o en un trabajo. ¿Acaso será posible que una instalación de gas o electricidad sea realizada por un técnico no matriculado, con la responsabilidad que esa tarea requiere? ¿Quién se hará cargo de los eventuales problemas posteriores que el mal ejercicio profesional pudiera provocar por la falta de control y fiscalización que es, justamente, la tarea ineludible de los consejos y colegios profesionales?
Al igual que otros consejos e instituciones colegiadas, los ingenieros rechazaron esas afirmaciones, ya que consideran que libertad es responsabilidad. Desde las entidades de profesionales coinciden en que desatender ciertos requisitos, altamente necesarios, para supuestamente eliminar burocracia no es propio de una dirigencia política que en las últimas décadas ha olvidado lo que es el compromiso en su decir y en su accionar diario.
El COPITEC por ejemplo, fue creado a través del decreto ley 6070/58 y ratificado por la ley 14.467. Es decir, su funcionamiento ha sido avalado por las instituciones democráticas argentinas. Hasta la fecha, una de sus tareas es otorgar las matrículas a profesionales y técnicos de la ingeniería que hoy más demanda tienen en el mundo y más desafíos presentan a la hora de la transformación digital. Libertad es responsabilidad, mientras que fiscalizar es realizar un ejercicio responsable de la libertad. Seamos responsables dijeron algunos profesionales.
